El déficit fiscal de 3,3% del Producto Interno Bruto en los 12 meses finalizados en junio fue una de los principales cuestionamientos económicos que la oposición realizó durante la campaña al oficialismo. En el próximo período de gobierno, el presidente electo, Tabaré Vázquez, está dispuesto a sacrificar resultado fiscal y evaluará tomar más deuda con tal de cumplir las promesas electorales que realizó. También apelará al apetito por inversiones que tienen las AFAP y la asociación con privados.
En una entrevista concedida al programa En la Mira de VTV, Vázquez dijo estar “de acuerdo” con que el espacio fiscal no da para financiar el programa del FA.
El presidente electo dijo en noviembre de este año que durante 2015 el crecimiento económico en Uruguay será de 3% del PIB. Ayer, reconoció que el crecimiento de la economía es insuficiente para sustentar los planes previstos.
“El espacio fiscal es un espacio que está reducido, por tanto hay que buscar otras formas de financiamiento. Las otras formas de financiamiento son despegarnos un tanto de ese paradigma de que todo tiene que financiar el Estado para buscar inversiones privadas. O para buscar, Uruguay esta catalogado muy bien en las empresas que miden el riesgo, por tanto fuentes de financiamiento que no sean estatales existen. Aquí mismo en el país si vemos las reservas que tienen las AFAP, que son muy importantes, si aseguramos por supuesto dentro del marco de lo que establece la ley el retorno del capital y aseguramos las ganancias que tienen que obtener por la inversión de ese capital creo que las fuentes de financiamiento están en esos niveles que acabo de plantear”, dijo Vázquez en VTV. El mandatario electo reveló que analiza modificar la ley para aumentar el tope de inversión de las AFAP. La legislación actual contempla la posibilidad de que las AFAP inviertan hasta 50% de sus fondos en valores vinculados a empresas públicas o privadas, siempre y cuando esa participación esté estructurada con las condiciones que establece la actual normativa.
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ya le comunicó que está dispuesto a dar un préstamo a Uruguay. También recibió ofrecimientos de la Corporación Andina de Fomento (CAF).
El presidente electo fue consultado sobre la posibilidad de tomar más deuda para cumplir con las promesas electorales. “Si esa deuda sirve para mejorar las condiciones de vida de los uruguayos y no corremos riesgo de hipotecar los equilibrios económicos y financieros tanto en el corto como en el mediano plazo”, respondió.
Las promesas
Durante la campaña, la oposición insistió en que las promesas del FA carecían de sustento económico. Incluso el candidato a vicepresidente blanco, Jorge Larrañga, calculó que las iniciativas costarían en el entorno de US$ 3 mil millones.
Una de las promesas de campaña de Vázquez que llevará más presupuesto será el incremento del presupuesto educativo a 6% del Producto Interno Bruto. La actual partida ronda 4,7% del PIB y representa más de US$ 2 mil millones anuales. El presidente electo también prometió en campaña triplicar la inversión en ciencia, innovación y tecnología de 0,3% a 1% del PIB.
El Sistema de Cuidados señalado por Vázquez como una prioridad tendrá un costo de US$240 millones anuales cuando esté en total funcionamiento a partir de 2019. Además, la separación de salario vacacional del sueldo del mes para el pago del Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF) privará al Estado de recaudar US$ 40 millones.
Vázquez también señaló como una prioridad la ejecución de un plan de infraestructura para, entre otras cosas, recuperar las carretas. Su ministro designado de Transporte, Victor Rossi, dijo que la inversión necesario ronda los US$ 3.000 millones. Sin embargo, el FA apuesta a que la mayoría de la inversión vial llegue desde privados, para lo que creará una Agencia de Infraestructura y utilizará fondos de las AFAP. Vázquez dijo que para recuperar las carreteras “se necesitan inversiones de miles de millones de dolares y el Estado no lo tiene”.
Fuente: El Observador (Link a noticia)